jueves, mayo 07, 2009

EL PREMIO - POR ARTURO SAN AGUSTÍN

EL PERIODICO DE CATALUNYA

Artículo de Arturo San Agustín: 'Premio'
ARTURO San Agustín

El barcelonés y ramblista Joan Estrada, cerebro del grupo de ilustres autodenominado Uno de los nuestros, me cuenta que la cuarta edición del premio Christa Leem, aquella rubia que sabía desnudarse, le será concedido el lunes a quien fue compañero y crítico de teatro de este diario Gonzalo Pérez de Olaguer. Se le entregará a su viuda, Mercè Taltavull.Cuando Estrada dice que Uno de los nuestros es un lobi siempre añade muy deprisa que es un lobi escrito con una sola be. Una sola be, no dos. Nada que ver, pues, con esos grupos estadounidenses que ponen y quitan presidentes. O los matan. Lo de Estrada se trata de gente legal, solidaria y premiadora de ciudadanos que merecen ser reconocidos. Como Gonzalo, que era bueno y, además, amaba a los cómicos.

Uno de los componentes del lobi Uno de los nuestros, que está formado por periodistas, actores, políticos, deportistas, médicos y artistas, es el presidente Montilla, pero ahora está muy en lo suyo, que es el Govern, y ya no asiste a las cenas del premio Christa Leem. Lo suyo, ahora, se llama Zapatero, financiación, todo eso. Otro es Carles Martí, el del ayuntamiento, el del flequillo socialista, que sigue asistiendo a las cenas del premio y se compromete, pero no sé si cumple. El año pasado dijo que se comprometía a organizar una exposición de la obra de Ocaña, aquel andaluz que pintaba las vírgenes a su manera, y de momento, nada. O sea, que a ver qué dice el lunes.

La cena del premio Christa Leem se celebrará el lunes en el hotel Oriente, que fue hotel de toreros, poetas y gente de la copla. Gentes como Federico García Lorca, que también se enamoró de los ojos de Miguel de Molina, ojos verdes que Rafael de León convirtió en copla famosa. "Verdes como el trigo verde. Y el verde, verde limón". Se ve que García Lorca se quiso llevar al huerto, es decir, al hotel Oriente, al de los ojos verdes, pero no lo consiguió. "Apoyá en el quicio de la mancebía/ miraba encenderse la noche de mayo."Gonzalo era bueno y Christa Leem murió demasiado joven. Ya solo tenía un pequeño balcón.